Perforar un pozo es solo la mitad del trabajo. Muchas veces, el agua contiene un exceso de sales, hierro, bacterias u otras impurezas que la hacen no apta para el consumo humano. Pero no te preocupes, la tecnología moderna de purificación de agua puede transformar incluso el agua más dura o contaminada en cristalina y segura.

Una de las soluciones más eficaces es la ósmosis inversa. Este sistema utiliza una membrana semipermeable que elimina hasta el 99,9% de los contaminantes, incluidas sales, metales pesados, virus y bacterias. Como resultado, obtienes agua pura, similar a la destilada.

¿Cómo funciona un sistema de ósmosis inversa?

1. Filtración previa – elimina arena, óxido, cloro y compuestos orgánicos, protegiendo la membrana y prolongando su vida útil.
2. Filtración por membrana – retiene incluso las partículas más pequeñas de contaminantes.
3. Depósito de almacenamiento – garantiza un suministro constante de agua purificada.
4. Mineralización opcional – se pueden añadir minerales beneficiosos para mejorar el sabor del agua.

Ventajas de la ósmosis inversa:

1. Eliminación de hasta el 99,9% de impurezas.
2. Mejora del sabor y transparencia del agua.
3. Protección de electrodomésticos contra la acumulación de cal.

¿Qué considerar al elegir un sistema?

1. Composición del agua – si contiene demasiados minerales, la ósmosis inversa es la mejor opción.
2. Mineralización – el sistema básico elimina todas las impurezas, pero puedes añadir un filtro remineralizador.
3. Mantenimiento – los filtros deben cambiarse a tiempo para garantizar un rendimiento óptimo.

Si tienes un pozo y la calidad del agua no es la esperada, hay soluciones. ¿Has enfrentado este problema? ¿Qué métodos de purificación has utilizado?